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Chicago Typewriter

  • Foto del escritor: Valeria Melara
    Valeria Melara
  • 14 sept 2020
  • 3 Min. de lectura

Las famosas novelas de chinos, que son más bien coreanos y mejor conocidas como ‘Doramas’ son producciones asiáticas que han ganado gran popularidad en occidente. Recientemente podemos encontrar muchas de estas series en servicios de streaming como Netflix. Y a pesar de que quien escribe estuvo muy renuente a ser parte de la fiebre de esta “ola coreana”, hoy en día puedo decir que existen muchos doramas chidos muy bien trabajados y que vale la pena recomendar, pues cabe destacar que estos no sólo abordan temas románticos sino que muchos están basados en la tradición y la historia de Corea, educándonos un poco sobre su cultura, sus costumbres y sus creencias.


Y uno de esos doramas chidos es Chicago Typewriter (2017), Sin duda uno de los mejores doramas que ví este nefasto año. La serie aborda el tema de la reencarnación desde el punto de vista de la cultura popular coreana pero no sólo envuelto en lo fantasioso o ficticio ya que al unísono toca un tema histórico delicado como la ocupación japonesa en Corea. Esta fue una época muy oscura en la que la expansión del Imperio de Japón sometió a Corea durante más de 30 años.


Escrita por la guionista Jin Soo wan y dirigida por Kim Chuc Kyu, esta historia nos presenta a un exitoso escritor de novelas de misterio y suspenso (Han Se-Joo) quien se encontraba en la cúspide de su carrera hasta que su fan número uno (Jeon Seol), un perro y una misteriosa máquina de escribir antigua aparecieron en su vida. A raíz de ello y un intento de homicidio de un fan loco, Han Seo-Joo comienza a tener una especie de bloqueo de escritor y sufre pesadillas extrañas en las que se ve a sí mismo en los años 30, siendo también escritor pero al mismo tiempo parte de un movimiento juvenil que luchaba contra el imperio Japonés.

Decide que ese sería el tema de su siguiente novela, la cual incluía una historia romántica paralela, por lo que la agencia estaba extrañada ya que no eran temas que Han Se-Joo abordara regularmente. A pesar de ello, la idea fue bien recibida y sólo esperaban que Se-Joo presentase los primeros capítulos que serían publicados en el blog del escritor. Pero Se-Joo seguía bloqueado y presentaba dificultades para comenzar a escribir hasta que le llegó la ayuda de donde menos esperaba: La máquina de escribir antigua.


Es una historia bien desarrollada de principio a fin, con personajes auténticos que tienen bien fundamentadas sus motivaciones y crecimiento. Un guión exquisito que nos ubica en el tiempo y lugar de la represión de la libertad de expresión que se vivió en aquel oscuro periodo desde una perspectiva realista con tintes de fantasía, pero que fácilmente pueden adquirir una connotación metafórica si les ponemos atención. Te pone del lado de las minorías envalentonadas con un espíritu de lucha y sed de independencia y justicia que bien puede adaptarse a más de una época. Súmale a ello un soundtrack estupendo y las formidables actuaciones del reparto.


Personalmente, me dejó una sensación de esperanza, realismo y claro, dudas existenciales. ¿será real la reencarnación? Y si es así, ¿habré traicionado a mi país en mi vida pasada? esas preguntas no me dejan dormir por las noches. ¡Pero, hey! Carpe Diem.




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